Robert Mapplethorpe y Pedro Almodóvar se conocieron en Madrid en 1984, durante la visita que el fotógrafo norteamericano realizó con motivo de su exposición en la Galería Fernando Vijande. Era la primera exposición de Mapplethorpe en esta ciudad.
Mapplethorpe ya era un artista consolidado y seguro de sí mismo a mediados de los años ochenta, además de ser un personaje casi de culto dentro de la élite intelectual y social de Nueva York, y también muy conocido en los ambientes gays y sadomasoquistas.
En ese momento, Pedro Almódovar era un conocido cineasta del underground español. Eran los años de la movida madrileña y, al parecer, Robert y Pedro salieron de fiesta por Madrid, que en ese momento era una ciudad acogedora y abierta a artistas extranjeros, y sobre todo y como reflejo de la movida, muy receptiva a jóvenes artistas más cerca del underground que del establishment.
Pedro Almodóvar todavía recuerda el impacto que le produjo la exposición retrospectiva de Mapplethorpe, en 1988 en el Whitney de Nueva York meses antes de la muerte del artista, de la que todavía guarda el catálogo.
Muchos de estos datos nos eran desconocidos hasta que le propusimos a Pedro Almodóvar que ejerciera de comisario de una exposición de Robert Mapplethorpe con la que la Galería Elvira González iniciaba la relación con la Fundación Robert Mapplethorpe.